Como mar y cielo
Mi cuerpo abraza el ritmo de ola
de tus dedos de agua sobre mi vida abiertos,
pulsante caricia que estremece al alma
con incesante maremoto en mi sentimiento.
Avanzas tu paisaje hacia al interior de mi playa,
a bordo, la voz de tu oleaje, en vivaz movimiento,
graba su intenso rumor y se eriza esta calma
con tu refrescante brisa de cortejo.
Y ampliamente besas mi tendida costa
con lengua sazonada en humedad y fuego,
en vaivén azul sobre mis arenas blancas
que se extienden como mar y cielo.
Reptando por los meandros de mis formas,
hospitalarias ante el escuadrón de tus besos,
se sumerge tu loca pasión en el alud de mis ansias
en el próximo segundo hasta el fin del tiempo.