Una noche enamorada de leyenda
Hoy quiero vagar en el seno de la noche,
ser su entera bruma en su silueta
o ser la nube desteñida de su vientre,
para pasar tan inadvertida como ella
y llegar a los caminos del insomnio
que a distancia, bajo otro cielo,
bien saben de tu tierra.
Quiero ser la extensión de su interior,
el doble de su porte
al copiar la oscuridad innata de su esencia
o ser un parche de su manto y que me lleve,
¡qué me lleve tan lejos de mí como ella pueda!
Y así, oculta y descolorida por los aires
poder llegar a tu lecho, a tu sueño, a tu vera,
y deambular por aquellas secretas calles,
donde tu vida se desanda
con la mía a cuestas.
Al fin, poder mirarte sin cansarme,
solo a ti entre millones,
por ser el amor de mi existencia.
Quiero ver cómo sonríe tu semblante
al contemplar mi presencia en una estrella,
mientras vivo de cerca el instante de tu carne
como una noche enamorada de leyenda,
que pasea por el brillo de tu pelo
al dejar un beso de neblina por tu oreja
y sentir tu luz dentro de mi sombra,
y me alumbres como a la luna que ella encierra,
aunque luego caigan mis negras gotas por tu cara,
mientras yo me hago una mañana aunque no quiera.